lunes, 7 de mayo de 2012

TOMMY AL BAT


México D.F., (diablos.com.mx) 7 de mayo.  LO sucedido el domingo en Boston  con un juego de 17 entradas que duro seis horas con siete minutos es una total vergüenza para las Ligas Mayores ya que en el inning 17 los dos managers se quedaron sin lanzadores, aparentemente, y utlizaron a jugadores de posición. En realidad los dos managers, Buck Showalter de Orioles y el hablantín Bobby Valentine del Medias Rojas, si tenían lanzadores disponibles en alguno de sus abridores, pero no los quisieron usar para no quedarse sin  su rotación ya establecida. Pero bien decía aquel manager famoso Leo Durocher que hay que pensar primero en el juego de hoy, ya que mañana o pasado podrá hasta suspenderse el juego por lluvia.

Los managers debieron haber empleado a alguno de sus abridores que llevara tres días de descanso por lo menos en un esfuerzo lógico por ganar un partido por el que habían luchado por 16 innings. Sucedió algo parecido al Juego de Estrellas de la infamia que quedó empatado porque los dos managers ya no tenían  disponible a ningún lanzador.

Sin embargo un  encuentro estelar es uno de exhibición con los dos managers poniendo un lanzador por entrada para quedar bien con todos los brazos elegidos. Aquí era un juego para el standing que se tenía que hacer lo máximo para ganar.
Ya para la entrada 17 quedarían unos dos mil aficionados o menos del total de casi 38,000 que llenaban el Parque Fenway al momento de iniciarse la contienda seis horas antes. Ello vuelve a demostrar que casi nadie se queda a los juegos demasiado largos.

Se informò que desde el cuatro de octubre de 1925 un juego de Ligas Mayores no habían tenido dos jugadores de posición  terminando un encuentro  y ese fue en un juego promocional en que como fin de temporada se anunció, para que fuera más gente, que los grandes bateadores Ty Cobb del Detroit y George Sisler de los Cafés de San Luis iban a lanzar la última entrada del encuentro. Dos bateafores que tuvieron campañas de .400 de average.

Otras veces un equipo ha tenido que utilizar como relevista a un jugador de posición en una paliza recibida, pero no habíasucedido que los dos clubes terminaran con dos peloteros no pitchers en la lomita.
Fue un juego para la historia, auque sea digno del Salón de la Vergüenza, ya que los managers, en primer lugar, no supieron utilizar a los pitchers relevistas en la cantidad de innings que pudieron hacerlo. Por ejemplo el mexicano Alfredo Aceves, del Boston que lanzó dos ceros, pudo haber lanzado casi un juego completo ya que originalmente es un pitcher abridor. En cinco innings extras los Orioles abrieron embasando al primer bateador, pero nunca tocaron la pelota de sacrificio. Vivimos en la época en que ya nadie sabe hacer el toque.

Los dos managers quedaron en ridículo al quedarse sin lanzadores y no querer utilizar a uno de sus abridores. El caso es que el primera base Chris DAVIS, actuando de designado y que en el juego tuvo de 8-0 con cinco ponches y una rola de double play, lanzó los dos últimos innings para ganar el juego y ser el héroe cuando el jardinero Adam Jones, convertido en un nuevo estrella, se voló la barda con dos en base.

El relevista jardinero McDonald del Boston no tuvo la misma suerte que Davis, quien por lo menos tira  strikes aunque sean de 84 millas. En el cierre del  17 Boston puso dos en base sin outs y lucía que venía otro, pero Davis ponchó a Adrián González con un pitcheo de 84 millas que estaba fuera de la zona.

Para Adrián fue su peor día en ya que se fue de 8-0. Hay días que en un bateador por bueno que sea no le pega ni a una sandía.

Los Orioles terminaron ganando la serie en Boston por barrida, tres juegos  cero. Aunque en un juego de 14 entradas y otro de 17.

Hablando de Pelota
 
Se acabó el ayuno y finalmente el domingo logró el dominicano Albert Pujols en Anaheim su primer jonrón en esta temporada en que juega con los Angelinos con un contrato de 240 millones de dólares. Se pasó un mes sin batear de cuadramgular pero finalmente logró el primero en un triunfo de Los Angeles sobre el equipo de Azulejos de Toronto.

Y de aquí en adelante se esperan grandes juegos de Pujols. Mientras tanto los Cardenales, si Pujols ni Tony LaRussa, van hacia otro título divisional.

Por cierto  que los primeras bases famosos de la Liga Americana están en pésima arrancada con Puols, Marc Texeira y Adrián González con  poco porcentaje de bateo y pocos jonrones. Veremos quien es elegido para abrir el Juego de Estrellas.

Otro que andaba muy mal pero el domingo dio jonrón  con la casa llena lo es Robinson Canó de los Yanquis y en un triunfo conta Kansas City. Y Alex Rodríguez, también mal, se la voló  con dos en base.
Los Indios de Cleveland le metieron a Yu Darvish, el pitcher de los cien millones plus, su primera derrota con Rangers de Texas en las Ligas Mayores. Los Indios andan sorprendiendo en la zona central de la Liga Americana como líder del grupo.

El zurdo Cole Hamels del Filiss se portó como un villano el domingo por la noche al tirarle un golpe intencional al novato tan publicitado Bryce Harper de los Nacionales del Washington. Ahora el Comisionado debe multarlo y suspenderlo por unos días. Harper se vengó del pelotazo al robarle el home al veterano Hamels, aunque los Filis ganaron.

Muy bien por la presidencia de la Liga Mexicana al ponerle al próximo Juego de Estrellas en Monterrey el nombre de Ramón Arano, el formidable pitcher mexicano que acaba de fallecer y dejó granes records  en  el circuito como el de más ganados en la historia. Y el más durable, el hombre de hierro que lanzó en seis décadas diferentes.

Una entrevista con  el formidable  Ramón Arano aparece en el libro Tommy al Bat en el CD donde son entrevistados grandes del Béisbol. Pida informes en el 55 35 68 53.